La llegada de los M-Locals a Londres, y los ambiciosos planes de apertura de los Little Waitrose suponen una amenaza para los Tesco y Sainsbury’s convenience, tradicionalmente algo descuidados en lo que respecta a la oferta de productos frecos.
Sainsbury’s lleva un tiempo probando innovaciones en su parque de tiendas convenience, y parece que ha llegado a un modelo replicable. Tiene ya un par de tiendas como la que visitamos, un poco mayores que la media de las tiendas convenience (unos 500 m2), con oferta de platos preparados elaborados en la misma tienda (un aprendizaje de su efímero Sainsbury’s Kitchen), y una sección de productos frescos con entidad propia, como si se tratara de un supermercado más grande: señalética propia, muebles bajos, y un poco estilo plaza de frescos.
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